Flyers y carteleria

Flyers

La misión del flyer es comunicar a tus clientes actuales o futuros, información sobre tu negocio, servicios, productos, ofertas, novedades, etc…

El flyer es una de tus muchas herramientas de comunicación.

Por esto mismo, funciona. Cuando buzoneas flyers, los entregas en mano o los dejas en tu comercio y el cliente lo coge, consigue comunicar. Logra su objetivo que  es comunicar.

Los flyers no hacen efecto de inmediato y su efecto no dura para siempre, por este motivo y el efecto del flyer empieza al 5º día de haberlos repartido y su efecto más evidente finaliza al 10º día.

Si haces publicidad sobre un producto muy demandado y que además tiene un precio muy por debajo del precio normal de mercado,   “puede”  que con una sola tirada consigas tu objetivo.

Pero si lo que quieres es consolidar tu marca como primera opción del mercado, los resultados tardarán más en verse y no servirá de nada plantear una campaña con respuesta a corto plazo y que esperes resultados positivos en un solo intento.

Al ser constante, acostumbras a tus clientes a recibir publicidad por parte de tu empresa y la esperarán.

Vuelves familiar tu imagen y tus ofertas con lo que ganas en tiempo de reacción de tus clientes frente a la información contenida en la publicidad.

Carteleria

La creación y colocación de carteles es una manera barata de reunir clientes. Dependiendo de la ubicación, este cartel potencialmente puede ser visto por cientos o miles de personas y, por algunos, más de una vez.

Si los carteles no fueran efectivos para la publicidad, no volverías a ver carteles de cine o carteles pegados en las paredes de los edificios. La cuestión es, cuanta más gente vea el anuncio de un producto, más probable será que vayan a echar un vistazo al mismo. Así, si un cliente ve tu cartel en un escaparate o en una cartelera, y luego ve un anuncio en un enlace de Google, es más probable que haga clic en ese anuncio.

En comparación con otras formas de publicidad, los carteles son más creíbles para el público en general porque aparecen en los lugares públicos y son más accesibles. Así el producto sea legítimo o no, muchos consumidores confían en lo que ven en un cartel.